Paulino Bernabe, nació en Madrid el 2 de julio de 1932. A la edad de 17 años, empezó a estudiar con Daniel Fortea, alumno de Tárrega. Fue durante los cuatro años que pasó con Fortea, cuando se desarrolló su interés en construir guitarras.
En 1954, el joven guitarrista se convirtió en aprendiz de constructor de guitarras y rapidamente en encargado del taller de Ramirez. En 1969, abandonó este taller para establecerse en Madrid.
Bernabe está considerado como un investigador que ha desarrollado sus propios sistemas y métodos de construcción. El sonido de sus guitarras se distingue por tener robustos bajos y fuertes tiples, siendo unas guitarras llenas de poder y con una gran fuerza y proyección de sonido.
No sólo es el exterior lo que hace las guitarras de Bernabe diferentes, en el interior del instrumento, el constructor ha trabajado durante años para lograr un sistema individual de baretas que ha sido diseñado para conseguir Aquel sonido ideal. Durante los 70, Bernabe generalmente usaba un sistema con cinco baretas internas y más tarde con siete. Más recientemente, ha desarrollado un sistema relativamente complejo de multi-bareta que incluye cuatro baretas trabajando hacia fuera desde la boca así como 3 refuerzos en forma de abanico de distinto espesor y altura.
Algunos guitarristas han descrito el resultado del sonido de sus guitarras como especialmente dulce comparado con el tipo de guitarras construidas por Bernabe anteriormente.
Bernabe también se destaca por utilizar maderas que no son vistas habitualmente en las guitarras clásicas. Emplea arce envejecido en fondos y aros, una madera menos frecuente que el habitual palosanto, otra madera también vista en los instrumentos de Bernabe es el peral y algunos observadores incluso han encontrado algo tán exótico como la madera de alcanfor en su taller.
A principios de los 80, el luthier cambió su lugar de trabajo, de su taller a su casa, donde se hacía la mayor parte de la construcción de la guitarra y el complicado interior. Desde ese momento trabaja junto a su hijo Paulino, su mejor y más fiel discípulo.
Bernabe ha dicho: Algunos constructores de guitarra piensan que ellos han hecho una guitarra superior a todas las demás pero yo no creo que todavía se haya hecho la mejor guitarra del mundo. Hasta ahora no hay un equivalente a Stradivarius entre los constructores de guitarras, sin embargo algún día espero hacer una guitarra excepcional.
En 1972 Bernabe construyó una guitarra de 10 cuerdas para el Maestro Narciso Yepes, desde entonces y hasta su muerte el Maestro Yepes siempre tocó con guitarra Bernabe.
En 1974 recibió la Medalla de Oro en la International Crafts Exhibition en Munich